Queridos niños y niñas, estoy feliz de volver a retomar nuestros encuentros después de un verano estupendo.
Espero que para vosotros también haya sido genial, sobre todo porque habéis tenido la oportunidad de viajar a España y poder pasar este tiempo de vacaciones con vuestras familias.
Este curso es muy importante porque es la recta final hacia nuestra meta más inmediata: "Recibir a Jesús".
Espero y deseo poder ayudaros en este camino y hacerlo de forma amena y divertida.
Vamos a comenzar como el curso pasado, tomando conciencia de que somos un grupo de amigos muy unido, que nos ayudamos y apoyamos. También el curso pasado vimos que teníamos una señal. ¿Recordáis cual?
Exactamente LA CRUZ